- Vendimos el scooter de Alex y compramos dos bicicletas plegables (elegimos Brompton porque… bueno, ¡es Brompton! :-)).
- Vendimos nuestro querido Stokke Xplory y compramos un carrito que también puede acoplarse a las bicicletas (elegimos el trailer Thule Cross, el singolo porque el doble ni siquiera cabía en la puerta de nuestra casa).
Este es un video de nuestra primera aventura en bicicleta, pusimos a Emily en el tráiler y Oliver fue con su Woom 2, y… nos sorprendió: Emily estaba feliz mirando y charlando y Oliver casi nunca se bajó de la bicicleta, caminó empujándola unos 3 minutos antes de aburrirse y terminar pedaleando la cuesta arriba más dura!
Pensando en los cambios en nuestra vida
Pero cuanto más pienso en mis experiencias pasadas y en mis decisiones futuras, más me doy cuenta de tres cosas:
1. Soy la única que puede hacer que el cambio suceda
Hay tanta gente que sabe que un cambio les haría más felices, pero nunca dan el primer paso hacia él. Eso me entristece, así que hoy quiero decirte esto:
Si eres uno de ellos, estas son las buenas noticias: TÚ PUEDES conseguirlo. Hoy. Decide un cambio, comprométete, céntrate en él y empieza hoy. Si lo haces, el cambio no sucederá mañana, no, pero es muy probable que suceda a lo largo del tiempo.
Aquí están las malas noticias: SOLO TÚ puedes hacer que el cambio suceda.
2. Soy el único obstáculo que me separa del cambio real
Cada vez que tengo que hacer un cambio en mi vida, me siento como si estuviera dejando un lago tranquilo y pacífico — lo conocido, lo familiar — para nadar en un río tormentoso e infestado de cocodrilos que termina en una catarata. Es aterrador.
El cambio es siempre para mejor
Cualquiera que sea la estrategia, creo que lo que mejor que funcionó para mí en el pasado es convencerle a mi mente (y empezar a creer realmente) que el cambio siempre es para mejor: no importa si sabes dónde te llevará o no, no importa si tienes éxito o fracasas, no importa si finalmente lo logras o no: al otro lado del cambio, en el fondo de esa catarata, la vida siempre es mejor: eres una mejor versión de ti mismo, te conoces mejor a ti mismo, tu perspectiva es más amplia, tienes una mejor comprensión. Y sí, siempre sobrevives a la caída ;-).
El cambio es difícil. Requiere mucho trabajo, mucho coraje y, a menudo, un salto de fe. Siempre hay progreso, siempre hay regreso. Pero una vez que empiezas, todo te parecerá más fácil.
Decide algo, comprométete, enfócate y empieza hoy. En una semana, estarás feliz de haberlo hecho.
¡Encuentra la cueva!
“Recuerda las sabidurías de Joseph Campbell: “la cueva a la que temes entrar tiene el tesoro que buscas”. Posee el miedo, encuentra la cueva y escribe un nuevo final para ti mismo, para las personas a las que debes servir y apoyar, y para tu cultura. Elija el coraje sobre la comodidad. Elige corazones abiertos sobre armaduras. Y elige la gran aventura de ser valiente y aterrorizado. A la vez.” (del libro Dare to Lead por Brené Brown)